SALMO 12 (11)
Tú, Señor, nos protegerás y nos librarás
12:1 Del maestro de coro. En octava. Salmo de David.
12:1 Del maestro de coro. En octava. Salmo de David.
Súplica apremiante12:2 ¡Sálvanos, Señor, porque ya no hay gente buena,
ha desaparecido la lealtad entre los hombres!
12:3 No hacen más que mentirse unos a otros,
hablan con labios engañosos y doblez de corazón.
12:4 Que el Señor elimine los labios engañosos
y las lenguas jactanciosas de los que dicen:
12:5 "En la lengua está nuestra fuerza;
nuestros labios nos defienden, ¿quién nos dominará?"
ha desaparecido la lealtad entre los hombres!
12:3 No hacen más que mentirse unos a otros,
hablan con labios engañosos y doblez de corazón.
12:4 Que el Señor elimine los labios engañosos
y las lenguas jactanciosas de los que dicen:
12:5 "En la lengua está nuestra fuerza;
nuestros labios nos defienden, ¿quién nos dominará?"
Respuesta del Señor12:6 "Por los sollozos del humilde
y los gemidos del pobre,
ahora me levantaré —dice el Señor—
y daré mi ayuda al que suspira por ella".
12:7 Las promesas del Señor son sinceras
como plata purificada en el crisol,
depurada siete veces.
12:8 Tú nos protegerás, Señor,
nos preservarás para siempre de esa gente;
12:9 por todas partes merodean los malvados
y se encumbran los hombres más indignos.
y los gemidos del pobre,
ahora me levantaré —dice el Señor—
y daré mi ayuda al que suspira por ella".
12:7 Las promesas del Señor son sinceras
como plata purificada en el crisol,
depurada siete veces.
12:8 Tú nos protegerás, Señor,
nos preservarás para siempre de esa gente;
12:9 por todas partes merodean los malvados
y se encumbran los hombres más indignos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario