Ríndanse y reconozcan que yo soy Dios: yo estoy por encima de las naciones, por encima de toda la tierra. El Señor de los ejércitos está con nosotros, nuestro baluarte es el Dios de Jacob. Sal 46, 11 - 12

Oremos por lo que está sucediendo en estos días, y en la sumisión silenciosa adoremos a Dios en espíritu y en verdad confiando en nuestro Soberano todopoderoso. Que todos los creyentes digamos esto, que el Señor de los ejércitos, el Dios de Jacob, ha sido, es, y estará con nosotros; y será nuestro refugio. Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? Con esto, a través de la vida y en la muerte, vamos a responder a todos los miedos.